BADAJOZ Y JAÉN PONEN EL BROCHE FINAL AL FESTIVAL CORAL DEL ATLÁNTICO EN SU XXXV EDICIÓN

Un año más la tónica del certamen han  sido la excelente calidad de las formaciones y la masiva afluencia de público

Anoche el Templo de Los Dolores acogió el concierto final de la trigésimo quinta edición del Festival Coral del Atlántico. Una edición en la que la calidad de las formaciones vocales, de ámbito local y andaluz, así como la gran afluencia de público a los conciertos otorgan un nuevo éxito a esta muestra, demostrando la solidez de esta cita cultural del otoño isleño, única, por sus características, en Andalucía.

En representación del Ayuntamiento asistían a este concierto de clausura el alcalde de la localidad, Jenaro Orta y varios miembros de la Corporación Municipal. Igualmente se encontraba presente el Rvdo. Párroco Gregorio Kosa así como los directores de la Coral anfitriona, Vicente Sanchís y Virginia Peña, su presidenta, Carmen Márquez y algunos integrantes de la misma que llenaron junto al numeroso público los bancos del templo.

La última jornada del Festival la protagonizaron dos formaciones que no dejaron a nadie indiferente con los dos magníficos conciertos ofrecidos. La primera fue la Coral Municipal de Azuaga, Badajoz, dirigida por Valentón Mingaray que ofreció un concierto de corte litúrgico con temas como Santa María Stela Do Día; Sanctus o el Ave María de Giulio Caccini, entre otras melodías más tradicionales como la Nuti o Say Something.

La otra formación llegaba desde Jaén, la Coral Polifónica de Baeza, que bajo la dirección de Antonio Carmona cerraba esta edición del Festival. Interpretaron temas tradicionales del canto vocal como A la Fuente del Olivo de LUis Bedmar, el Hallelujah de Leonard Cohen, canciones populares de Sudáfrica; Contigo en la Distancia, bolero, o Cantares, de Antonio Machado para finalizar regalando al respetable una magnífica interpretación de Andaluces de Jaén, que escribiera el poeta Miguel Hernández y que popularizara el Grupo Jarcha.

El alcalde de la localidad fue el encargado de clausurar esta trigésimo quinta edición del Festival, no sin antes hacer entrega del emblema del mismo a las dos formaciones. El primero de ellos y a petición del primer edil, fue entregado por el autor del emblema, Francis Zamudio al presidente de la Coral de Azuaga. El segundo de ellos lo entregaba el Cura Párroco a la formación de Baeza. Seguidamente la presidenta de la Coral Polifónica Isla Cristina recogía también algunos obsequios de las dos corales en agradecimiento por su recibimiento en la localidad.

El alcalde puso de manifiesto «la solidez de este festival» destacando «la excelencia de las formaciones que han participado este año» a las que mostró en nombre del pueblo isleño su agradecimiento.

 

Jenaro Orta puso de manifiesto «el gran esfuerzo que supone organizar una cita cultural del calado de este festival, único en Andalucía por sus características y que tanto aporta a la cultura y el patrimonio isleño y onubense» y destacó que «esto ha sido posible gracias al trabajo de muchas personas que a lo largo de todas estas ediciones han luchado para que no dejase de celebrarse» insistiendo en que «desde el Ayuntamiento trabajamos para que siga ganado e calidad y en participación.» 

 

«Somos referente en el ámbito del canto vocal y esta es una realidad que tenemos que cuidar y mantener», dijo Jenaro Orta.

Para finalizar, el alcalde agradeció a todo el personal técnico municipal su trabajo en esta edición y al Obispado y al Cura Párroco «la cesión de este espacio inigualable para escuchar canto coral como es la Iglesia de Los Dolores, con una acústica inmejorable» así como también a todas las instituciones y entidades implicadas “su esfuerzo y colaboración en esta edición” especialmente a las Coral anfitriona y  al público fiel a esta cita.