Archivo Municipal de Isla Cristina, Leg. 706, Solicitud y licencia para el aprovechamiento del monte común
El aprovechamiento de os terrenos comunales, ya fuera el monte, una dehesa o cualquier otro bien perteneciente a todos los vecinos, fue una constante hasta las diferentes desamortizaciones de mitad del siglo XIX.
En dichos espacios los vecinos, por turnos, por sorteo, de manera común y siempre mediante un uso racional que permitía la persistencia del ecosistema con el disfrute del producto extraído de los mismos, se llevaban a cabo actividades como la tala, el pastoreo, la siembra, la recolección, etc.
En el caso que hoy nos ocupa tramos un ejemplo de una solicitud de 1806 practicada por Gonzalo Gómez, un vecino de Puebla de Guzmán pero residente en ese momento en Lepe al haber arrendado un higueral al sitio de Valdepegas, que necesitaba hacer una empalizada para el mismo, y para lo que solicita permiso para cortar los “palos de pino que sean precisos y que señale el guarda celador de montes”.
La licencia se le concede para “tres pies de pino”, prohibiéndose cualquier tipo de exceso, según mandaban las ordenanzas en vigor, en cuyo caso sería castigado.
Es curioso como el escribano que tramita el expediente era Roque Barcia Ferraces, el padre del ilustre político y filólogo Roque Barcia Martín, quien en calidad no solo de escribano público y de número (notario) y del cabildo (secretario del ayuntamiento) emite su firma, sino que también estaba comisionado como encargado de los montes de propios del término.
Solicitud y concesión de licencia para el aprovechamiento del monte común
FONDO: Archivo Municipal de Isla Cristina.
SECCIÓN: Secretaría
SUBSECCIÓN: Patrimonio
SERIE: Bienes de Propios
SUBSERIE: Licencias de montes
FECHA: 1806